Medio bogavante con caparazón junto a la carne de la pinza y antebrazo. Retiramos las vísceras de la cabeza y rellenamos ese espacio con la pinza y codo previamente pelados por alta presión. Todos los bogavantes son seleccionados individualmente, revisando su calibre y características organolépticas. Podemos asegurar que todos los bogavantes están vivos antes del proceso de alta presión y ultracongelación.